Ayer hubo dos partidos del Barça en la Champions. Uno perdió y otro ganó con estilo. Las chicas avanzan y se acercan más a la final en Göteborg.
El debate de ayer parece ser sobre la pérdida del Barça en París a nivel resultado global. La suerte no estaba con el equipo masculino anoche en Parc de Prince e la capital francesa. El equipo luchó con lo que podía, pero el penalti fallado por Messi describía bien cómo le iba la noche. Un estadio vacío, un club en época de cambio radical y con una plantilla rejuvenecida al menos da luz para un buen futuro. Recuerda que aún falta Ansu Fati.
La gran exclamación de ayer, sin embargo, fue el equipo femenino de Lluís Cortés que viajó a Dinamarca para acabar los octavos de grandeza tal y como hizo en la ida en casa.
El impresionante resultado 0-5 demuestra que a lo mejor éste es el año en que el Barça logra a superar todos los objetivos y poder titularse campeón de Europa.
La final de la Women’s Champions Leaguese juega en Göteborg, Suecia, ciudad natal de nuestro editor ejecutivo Daniel, pero también una ciudad bien conocida tras batallas historias entre el Göteborg y el Barça en los años 80 y 90.
El estadio Gamla Ullevi coge apenas 20.000 espectadores, pero tal y como está todo veremos si habrá alguien en la grada. Según las autoridades suecas es muy probable que no. Una pena ya que la ciudad este años también cumple 400.
Al superar los octavos al Barça sólo le queda dos obstáculos más para reservar su plaza en la final y de esa manera poder volver a luchar por el trofeo tal y como hizo hace dos años en Budapest.
Recordad Culés, que aún tenéis un equipo en los cuartos de la Champions.
