La Pandemia nos ha vuelto a agarrar

Foto: Futbol BCN

En 2020 sufrimos una de las paradas más largas del fútbol amateur y base alguna vez visto. Desde entonces hay protocolos claros qué hacer en caso de casos positivos.

Cuando volvimos a jugar en marzo el año pasado, hace casi 10 meses, pensábamos que a lo mejor ya podíamos volver a al menos jugar y entrenar con normalidad. Y lo hicimos.

Pero de repente, quizás un poco inesperado, volvió a agarrarnos con toda su fuerza. Sí, el virus se ha cambiado, pero el protocolo no tanto, especialmente no para los que dan positivo. Y con toda la razón.

En principio no hace falta cuarentena si hayan pasado 48 horas sin síntomas y un prueba negativa desde el contacto estrecho. Pero hasta hace poco, todos los niños con menos de 12 años ni siquiera podían vacunarse. Y los efectos, tanto por casos negativos como positivos, han afectado duramente el fútbol base este invierno.

Cada fin de semana hay una gran cantidad de partidos aplazados, muchas veces por tener jugadores y jugadoras de la misma clase o familia en el equipo. Un equipo de fútbol 7 con entre 9-12 jugadores por plantilla fácilmente puede acabarse bien sufrido con 2-3 casos y una par de contactos estrechos. Estos últimos dos meses hemos visto equipos quedándose sin la mitad de sus plantillas para los entrenos y partidos.

El fútbol sigue, y menos mal por ello, porque quitárselo de los que no han de hacer cuarentena, es un castigo aún más duro. Por otro lado, por perspectiva de un entrenador, le quedarán cortos sus planes ya que si trabajas con un plan de temporada y le falta la mitad del equipo, se quedará teniendo que cambiarse los planes o al menos ajustárselas.

Al fin y al cabo todos en el fútbol son personas, seres humanos,y la salud siempre será lo primero, a pesar del afecto que tendrá la situación en el fútbol. Sin embargo, sigue siendo el caso de que la Pandemia nos agarra la camiseta al intentar correr adelante y el «árbitro’ sigue sin saber expulsarla.

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